Según las creencias sociales y los mitos culturales siempre se ha creído que el dolor y el sufrimiento que llega a través de de una infidelidad solo lo vive la persona que ha sido traicionada, de hecho los juicios, las críticas y las sentencias que se crean alrededor de un descubrimiento de esta magnitud, generalmente, van dirigidos hacia la persona que ha sido infiel en la relación, en efecto, entendemos también, que es una verdadera  catástrofe emocional lo que se vive en la relación en el momento de descubrir una traición, sin embargo lo que quiero que comprendamos mediante este blog es que el DOLOR no lo vive solamente el traicionado (a), es una situación que también conlleva a una afectación emocional al infiel, a la tercera persona y muchas veces a una cuarta persona; hasta aquí, hablando simplemente de los protagonistas del episodio, porque no podemos dejar de lado los hijos si los hay, y las familias entre sí que muchas veces cuando la cercanía es real y con amor sincero hacia los miembros de la pareja que enfrenta este desastre, no solo quedan sorprendidos sino que también quedan “adoloridos” 

El DOLOR que se siente en el núcleo de la pareja se da por una emoción que se llama MIEDO, es un temor del tamaño del mundo que va acompañado lógicamente de ira, tristeza e impotencia, es un miedo hacia lo que se viene, un miedo al futuro, que va alimentado por una una serie de recuerdos y sostenido por una memoria que se activa automáticamente cada segundo del dia y hasta en la noche, preguntándose el traicionado(a) como, cuando, donde y por que?

Aprovecho este párrafo para hacerte una recomendación y pedirte el favor que no le eches sal a la herida, y que hagas lo máximo posible por dejar de maquinar y salir de la película, y de las imaginaciones de aquello que pudo haber sucedido, del cómo y del cuando. 

La atención ahora, si han decidido continuar es enfocarse en la solución, recuerda que cuando una relación marcha mal es porque los dos tienen responsabilidades y cuando una relación marcha bien es porque los dos están aportando.

No obstante es inevitable la serie de conjeturas mentales que siguen llegando constantemente. ¿Qué va a pasar de ahora en adelante? ¿Cómo iremos o cómo voy manejar esta situación? ¿será que si voy a ser capaz de superar esto? ¿pero si sigo, sera que voy a quedar como un tonto(a)? ¿qué va a pensar mi familia o mis amigos? ¿si terminamos entonces qué va a pasar con nuestros hijos? y muchos etc más.

El punto es empezar a realizar un trabajo interior tanto personal como en pareja lo antes posible, ya que de lo contrario, nos vamos a sumergir tanto en el DOLOR y en el conflicto que los dias seran mas largos, el sueño y el descanso brillarán por su ausencia, la angustia y el llanto estarán presentes de manera obediente, la improductividad personal, laboral y de resultados de vida será evidente, y las emociones de tristeza, confusión y venganza se manifestaran claramente, lo que obviamente traera consecuencias no tan buenas y hacen mayor la crisis.  

Es de entender que el DOLOR acompañado por la ira trae pensamientos al traicionado como: “que dolor van a sentir los demás (pareja y amante) si me traicionaron fue a mi” y es precisamente esa la primera tarea que se debe empezar a trabajar, salir del victimismo.

Hay una premisa muy diciente en el mundo del desarrollo humano y la espiritualidad: “es preferible trabajar con un culpable arrepentido, que con una víctima” puesto que la víctima deja de buscar amor y justicia y empieza a buscar retribución.

Ahora bien, a pesar de que no es fácil para el traicionado entrar en ese nivel de aceptación, será muy saludable empezar a comprender que todos somos seres emocionales y en tal virtud no importa si soy el traicionado, el infiel, el amante o el compañero(a) del amante, vamos entonces a mirar a grandes rasgos cuáles podrían ser algunos de los dolores que enfrentan las diferentes partes para entrar en un poco de comprensión y aceptabilidad:

• El traicionado(a):  siente que se ha fracturado su casa, su cama, sus sueños y obviamente su relación, entonces se pregunta, ¿cómo puedo seguir durmiendo con el que dice que me ama, si me traicionó?, también se empieza a comparar con él o la amante ¿será que es mejor que yo? ¿que tendrá que yo no lo tengo? ¿Qué habré hecho tan mal? y entra la sombra a desvanecer todo lo que habían construido hasta ese momento dejando su autoestima muy por debajo, perdiendo obviamente autoconfianza, y alimentando la inseguridad hacia lo que se viene, ya sea con la misma persona o el inicio de una nueva relación, de ahí la importancia de empezar un trabajo personal eminentemente.

• El infiel: por su parte el infiel siente DOLOR porque se percibe como indigno, siente que ha perdido su dignidad al haber quebrantado sus principios y valores, entra en un sentimiento de “culpa”, lo cual, lo lleva o la lleva a vibrar en una emocionalidad de condena diaria,  permitiéndose experimentar el nivel más bajo que es la “verguenza” de acuerdo al mapa de la conciencia, sintiéndose humillado y miserable ante sus hijos, demás familia y amigos; siente dolor porque sabe que será complicado y difícil recuperar la confianza de su pareja y que ha destruido en muy poco lo que costó construir en tanto, y su dolor se agudiza porque no sabe si es mejor quedarse callado o contestar cada pregunta que hace su pareja, al darse cuenta que con cada respuesta entierra mas el puñal y le causa mas dolor.

Ahora sabe que haber entrado a experimentar los campos de la infidelidad ha sido un desacierto total. 

• El o la amante: Aunque siempre se ha catalogado como el villano de la película muchas veces es inocente, y aunque no lo sea, también ha entrado a jugar con su corazón en una situación donde ahora se siente como el ser más indigno, señalado, criticado y juzgado, sin derecho a reclamar o poner sobre la mesa opinión alguna, siente dolor porque se ha sentido utilizado, manipulado y engañado.

El mundo de fantasías que quizás pudo haber soñado ahora lo ve como algo absolutamente imposible, porque inocente o no, todo ha sido una completa mentira y una absoluta ilusión, porque se entera de que su amante aunque le dijo que su relacion ya no marchaba bien y que estaba a punto de separarse, nunca va a dejar a su esposa, ni a sus hijos, ni su patrimonio por algo que solo era sexo y capricho.     

2 recursos o herramientas 

Por otra parte aunque el ambiente que se ha generado en la relación, el dolor que se ha causado en las partes y en todo el entorno de los implicados en una situación de infidelidad no ha sido el más agradable, puesto que en el momento de descubrir una infidelidad se entra en un shock que paraliza el cerebro y se da una respuesta instintiva en la que no se sabe si huir, luchar o quedarse congelado, desde Transforma2 te vamos a dar 2 recursos para que tomes acción y enfrentes la situación de manera adecuada.

1. No tomen decisiones de manera acelerada, porque aunque es difícil hacerlo. intenten separar la situación de infidelidad con respecto a las emociones que se sienten por la relación, de lo contrario podrían tirarse por el abismo años y experiencias o aprendizajes de mucho valor marital.  

2. El segundo recurso va de la mano con el primero ya que al conservar la serenidad y la calma, la recomendación es, no enfocarse en lo que se está pensando sino en lo que estoy sintiendo por la relación, para poder tomar decisiones con sabiduría, de manera que se le debe dar “más fuerza a lo que se siente que a lo que se piensa.”

“RECUERDA QUE SI CAMBIAS, TU MANERA DE PENSAR CAMBIARÁ TU MANERA DE VIVIR.”

Robin Angel Coach!!!